Recibida la convocatoria de Asamblea General Ordinaria de Residentes para el próximo día 21 de marzo con un orden del día provisional, echamos en falta el siempre repetido punto “Informe del Presidente”.Desconocemos qué razones tiene la Junta Directiva de esta Demarcación para obviar este punto al que nos tenían acostumbrados, en todo caso estimamos que es una falta de consideración hacia los colegiados que no se nos quiera tener informados de todos los temas que en la actualidad nos afectan y están haciendo tambalear nuestra profesión, como la nueva ley de Servicios Profesionales, y otros asuntos más, que seguramente se están cociendo y de los que se tratan en juntas del COACyLE y del Consejo Superior y por supuesto darnos explicaciones de las gestiones que se están realizando en esta Demarcación.
Delegar para que seamos los propios colegiados los que propongamos los temas a tratar en la asamblea solicitándolo por escrito es una actitud “cómoda”, además de una dejación de sus funciones (art. 40.l de los Estatutos Colegiales). Son varios los temas que quedaron abiertos en la pasada asamblea general de noviembre y seguramente aparecerán como preguntas en el orden del día.
¿Es premeditado? ¿Se pretende evitar el debate inicial o se va a presentar alguna propuesta por parte de allegados a la Junta de temas que ya quedaron zanjados en la asamblea anterior, para dar pie a retomarlos no por iniciativa de la Junta sino de determinados colegiados?.
Lo cierto es que en el caso de no presentarse ninguna propuesta de temas a tratar, la asamblea pasaría sin pena ni gloria, como un mero trámite para aprobar las actas anteriores, la memoria y el presupuesto del año anterior. La ley del mínimo esfuerzo y del mínimo interés hacia el colectivo.
Queremos un Colegio vivo, participativo, transparente, huyendo de la imagen no deseada de oficina recaudatoria y la burocracia del “Castillo” de Kafka.
